Al momento están identificados 22 chacareros que trabajan en sus huertos, donde a más de producir sin químicos están dedicados a la recuperación de semillas de las ocas, mashua, variedades de papas ancestrales. “El plan busca que los campesinos comercialicen en los mercados los excedentes de su producción”. Con estas actividades y el traspaso de conocimientos ancestrales el Liceo se encarga de que sus estudiantes sean seres humanos capaces de defender su cultura, raíces y valores. “Queremos estudiantes ecuatorianos, que sepan lo que es ser ecuatoriano y que se sientan orgullosos, que aprendan a aceptar las diferencias”, asegura la rectora Carmen Andrade. Pero en las ciudades, poco relacionadas a las actividades del agro, son minoría las nuevas generaciones que conocen sobre esta tradición, perdiéndose así la diversidad cultural.
Su chacra, localizada en el barrio San José de la comunidad Chibuleo a 25 minutos al suroeste de Ambato, es el laboratorio y el aula de clases donde da indicaciones a sus vecinos. El Sistema Educativo Campoverde inició en el año 2004, con la participación de profesionales de reconocida trayectoria dentro y fuera del país. Diario El Heraldo, fundado un 15 de marzo de 1958, se ha caracterizado por ser un periódico de tradición en la zona centro del país, siendo un referente en la comunicación en Tungurahua y sus diversos cantones.
La Importancia De Las Costumbres Ancestrales En El Desarrollo Humano
Es un hombre de campo a tiempo completo y cuando sus vecinos requieren de algún consejo sobre la producción agrícola, no duda en ayudarlos.
“Ahora comemos sano en la familia y lo que nos sobra vendemos en los mercados de Ambato”, comenta. Es Juan Lligalo uno de los 22 chacareros dedicados a la recuperación de la agricultura ancestral en las comunidades de Chibuleo, Pilahuín, Salasaca, Ambatillo y Juan Benigno Vela, en Tungurahua. Esta actividad que busca fortalecer las manifestaciones culturales, se replicó el lunes 23 de marzo en la parroquia Eugenio Espejo y el próximo 25 de marzo se realizará en la parroquia González Suárez del cantón Otavalo.
Comparten Saberes Ancestrales Sobre La Agricultura
La Unesco ha declarado que la globalización se ha visto como una amenaza en la conservación de valores culturales ancestrales y se plantea como un desafío más complejo para las naciones el incluir las diferencias en la convivencia social. Martínez’, mencionó que han realizado investigaciones para determinar procesos ancestrales dentro de la agricultura. “Hay que recuperar los conocimientos ancestrales de nuestras comunidades, analizar cómo ha evolucionado y luego complementar con técnicas antiguas y actuales”, manifestó.
En Tungurahua, 22 familias conservan la técnica para la producción agrícola andina. En Chibuleo, Pilahuín, Juan Benigno Vela y otras comunas se cultiva sin usar químicos. El Movimiento Indígena de Tungurahua aplicará un plan de búsqueda de los chacareros. “Nosotros estamos totalmente comprometidos, creemos que es una responsabilidad histórica que en nuestros espacios se fortalezca la identidad y nuestro conocimiento ancestral. Además es nuestra responsabilidad promover nuestras manifestaciones culturales para que nuestros hijos se sientan orgullosos de ser ecuatorianos, manifestó Paolina Vercoutére, directora distrital del MIES Ibarra. Para agradecer la bondad de la Pachamama por haber permitido una buena producción y cosecha, en algunos grados se celebra el Inti Raymi , en junio.
Para recuperar la agricultura andina, el Movimiento Indígena de Tungurahua busca poner en marcha un proyecto. Manuel Ainaguno explica que una de las primeras acciones es recorrer las comunidades para buscar a los chacareros que practican este tipo de producción con los saberes ancestrales. “La concept es que ellos multipliquen los conocimientos y más gente comience a producir de una forma sana”. Nueve unidades de atención CIBV de la población kichwa de esta localidad participaron en el evento, que constituye el inicio del nuevo año andino.
En Imbabura Se Busca Aprovechar Desechos Sólidos De Cuatro Cantones
Para las podas, la siembra y la cosecha y otras actividades agrícolas, se guía por la posición y el tamaño de la Luna. Lligalo se desplaza lentamente y con precaución para evitar daños en el cultivo. En su parcela produce maíz, quinua, habas, mashua y ocas, sin usar químicos ni pesticidas para evitar las plagas, sino abonos y brebajes preparados con hierbas amargas, dulces y picantes. Así se reconoce la importancia de que las escuelas y colegios fomenten estas tradiciones en la enseñanza de los menores.
Y para la conmemoración de los difuntos la institución también organiza la molienda del trigo para convertirlo en harina y los más grandes ayudan a los niños en la preparación de la colada morada. El hombre de mediana estatura cube que los productos agrícolas de los páramos andinos estaban a punto de extinguirse en su pueblo, porque sus habitantes se dedicaron sembrar cebolla paiteña, ajo y pastizales. En esta actividad los estudiantes aprenden por un proceso de maduración particular person, a través de sus propias acciones y en interacción con la realidad. El psicólogo Fritz Piaget, reconocido por sus aportes al estudio de la infancia, indica que así el aprendizaje es un descubrimiento del saber, en el contexto donde el alumno se pone en contacto directo con la realidad para encontrarse con la posibilidad de descubrirla por sí mismo. “Abuelos, padres, generaciones antiguas utilizaban estas herramientas para labrar la tierra.
Ministerio De Inclusión Económica Y Social
Las coyundas o tiras forjadas de cuero no se rompen ante la fuerza que hacen los animales de cargaban los azadones para labrar el suelo. Varios instrumentos elaborados por madera, cuero de vaca y otros materiales, eran usados por ancestros para la preparación, cultivo y cosecha de productos agrícola. A pesar de que Lligalo no tiene un título universitario, sus conocimientos en agricultura orgánica lo avalan como un especialista en esta área.